segunda-feira, 15 de setembro de 2008

Un beso hasta dejar la vida

O suplemento "Domingo", do El País, contava no último domingo a história de amor de Arturo Lodeiro e Julia Muñoz. Passa-se em 1940, em pleno franquismo. Ele amava-a e foi preso e condenado ao fuzilamento. Ela amava-o e tinha no ventre um filho de ambos. Antes de morrer, ele quis casar por procuração para que ela não passasse a vergonha social de ser mãe solteira. E conseguiu. No dia da boda à distância, foi morto. E antes de morrer escreveu-lhe esta carta que o El País agora reproduz (o artigo chama-se "Boda y muerte en un día"):
Madrid, 27 de abril de 1940.

Adorada esposa: en este momento realizo mi voluntad por lo cual puedo llamarte al final de mi vida, esposa mía, y a mi niña, hija verdadera. A pesar de que los momentos no son de los más agradables, al menos me cabe la alegría de haber cumplido contigo como Dios manda. Ya, querida nenita, puedes llamarme esposo, y cuando hables a nuestra Julina de mí, le digas que su papaíto la quería mucho por ser hija tuya y por quererte como jamás quise. Tú, Julia mía, procúrate una relativa y sana felicidad. No le des a mi nena un padre que sea malo.

Ya sabes que no quiero rencores. Acepta esto con la mayor resignación y que lo consideres como un error, como lo que es. Cuando éstas recibas, ya habré dejado de existir y mi último pensamiento habrá sido para mis dos niñas inocentes y desamparadas. Ten valor, Juli, piensa en nuestra nenita.

Un beso hasta dejar la vida, para ti y la niña".